Subida al Santuario de la Magdalena de Novelda 2010

Por cuarto año consecutivo, acudí a la XXIV Subida al Santuario de la Magdalena de Novelda (Alicante), lugar de cita de los amigos, compañeros y blogeros del sureste de la península, siendo para unos el final de la temporada, y para otros, el inicio de una nueva campaña, con miras a las medias y maratones del próximo otoño.

La peña de la blogosfera

En esta ocasión acudimos a Novelda, 16 atletas del club Marathón Cartagena, además de numerosos compañeros de la blogosfera, como los tocayos Ramón Blasco y Ramón el “crevillentí”, Miguel Ángel el "motorista" de Villena, Kiko de Relleu (en perfecto estado de forma de cara a la Subida al Veleta), el veterano Pepe Moratinos, Alberto Costilla "el sombrilla", o los compañeros Paco y Raúl.

Ramón, Pepe, Maura y Fernando

Como es tradicional, calor en el ambiente (31º a las 19:30 h., hora de la salida) y un total de 1.300 corredores dispuestos a recorrer los 11’8 Km. del duro circuito.

Los amigos ilicitanos, Ramón Blasco, Marga y Antonio

No podían faltar los amigos ilicitanos y santa poleros, como Julia, Rosa, Mª del Mar, Raquel, Marga, Piluca, Gaspar, Antonio, Ramón, Alberto y Paco.

Santuario de Santa María Magdalena

Los primeros cinco kilómetros son de subida progresiva, con discreta pendiente y algunos toboganes. Todavía con alguna molestia en la zona de mi lesión, decidí regular en la subida, olvidándome del ritmo, y a pesar de todo, sufrí por el calor.

Subida al Santuario

En el km. 5 comienza la fuerte subida de 800 m. a la colina donde se ubica el Santuario de Santa María Magdalena y el Castillo de la Mota.
La ascensión de esos 800 m. tiene una pendiente media del 13 %, superando el 15 % algunos tramos. El sufrimiento no te deja contemplar el templo de estilo modernista catalán, obra del noveldense José Sala Sala, y que recuerda a la obra de Gaudí.

Castillo de la Mola

Tras llegar a la base del santuario, un pequeño repecho nos conduce a la cima, donde a la derecha se ubica el Castillo de la Mola, claro ejemplo de edificación almohade del S. XII, que fue edificado sobre unas ruinas romanas.

Bajada del Castillo de la Mola

Tras un respiro, y el avituallamiento correspondiente, comienza la fuerte bajada, donde los cuadríceps amortiguan el ritmo rápido del descenso.

Este año, tuvimos la suerte de cara, al recibir de frente una brisa fresca, que hizo más llevadera la segunda parte del circuito.

Pese a la ligera contractura en la zona de mi lesión, pude incrementar el ritmo en los kilómetros finales, por las calles de Novelda, para presentarme en la pista de atletismo bajando más de un minuto con respecto al tiempo del año anterior.
Al final terminé en 54:37 (a 4:38/ Km.), haciendo más rápida la vuelta, y con mejores sensaciones que en la anterior edición.

Con el amigo Kiko

El compañero Raúl Guevara obtuvo un meritorio 7º puesto de la general con un crono de 38:57, seguido por los compañeros David Conesa y Quique Jover de la Rubia.
En mujeres la compañera Wafiya Benali fue subcampeona con un tiempo de 43:21, con un gran papel de las veteranas Ana, Maura y Toñi, además de la senior Carmen.

David Conesa y Raúl Guevara

Para recuperar fuerzas, nos dirigimos con los amigos ilicitanos, al “Mar i Merlot” de Elche, degustando los exquisitos raviolis de alcachofas y gambas, de morcilla y de espinacas con pasas, las brochetas y el entrecot a la piedra, para terminar con un sorbete de limón a la hierbabuena.

¡Será posible que volvamos a Novelda!