lunes, 7 de marzo de 2011

Media Marathón de Cartagena 2011

Se disputó la XVIII Media Marathón de Cartagena en un día frío y gris, pero con una temperatura ideal para correr, en torno a los 12º C a la hora de la salida.
El club Marathón Cartagena fue el más numeroso con más de 100 atletas en la línea de meta y varios puestos de podium, sobre todo a cargo de las mujeres del club.

Compañeras del club Marathón Cartagena

Los periodistas locales, que saben bien poco de atletismo, resaltan como titular que "sólo 44 mujeres corrieron la prueba".
Es cierto que es una cifra baja, pero afortunadamente la cifra de mujeres aumenta año tras año, y una participación del 8 % no está nada mal, teniendo en cuenta la distancia de más de 21 Km. de una media marathón, no era una carrera de 5 Km. donde si participan muchas más mujeres, dada la distancia.

Estas mujeres después de sus tareas laborales y familiares, todavía sacan tiempo para entrenar y competir, madrugando los domingos para ir a las carreras.
Habría que preguntar al periodista si su mujer, hermana o prima, hace deporte después de su jornada cotidiana. Cierto tufillo a "machista" se ve en el subtítulo de la noticia, y con eso rellena la crónica de la media marathón, ya que de atletismo no tiene ni la más remota idea.

Club Marathón Cartagena

Tras dos semanas de acumular kilómetros decidí hacer de liebre de la compañera Olga Rodríguez Arnaldo, que intentaba acercarse o bajar de 1:40, partiendo de un tiempo personal de 1:43.

Acompañando a Olga

Cerca de 650 atletas tomaron la salida, una cifra baja que la organización debería considerar, siendo uno de los fallos, la escasa y tardía publicidad de la prueba en los medios habituales, no apareciendo en forma de "banner" en las principales web especializadas, con lo cual los atletas se inscriben antes en Torrevieja o Murcia.

Una pena cuando por otra parte, además de la bolsa del corredor, la Concejalía de Deportes invita a todos los participantes y familiares, a una comida en las pistas de atletismo, basándose en ensalada, embutido, paella y cerveza, una vez finaliza la entrega de trofeos.


El azul peralico en las calles de Cartagena

A las 9:30 h. se daba la salida, y desde el primer kilómetro pusimos un ritmo para bajar de la barrera de 1:40. La primera vuelta fue un poco rápida, pasando con una ventaja de unos 20’’. En la segunda vuelta, se reguló pasando en los tiempos a falta de la tercera vuelta, lo que indicaba que Olga al menos batiría su MMP de largo.
Mientras tanto, nos adelantaban los compañeros Miguel Martínez San Millán y Nacho Garrido, que se proclamaría campeón en la categoría de discapacitados visuales.

Miguel y Nacho

Comenzaba la tercer vuelta con la subida de la Cuesta de Capitanes Ripoll, la penúltima tachuela del recorrido. En la bajada hacia la Calle del Duque, Olga impuso un ritmo vivo, señal de que todavía tenía fuerzas, y salvo descalabro final, batería de largo su tiempo personal.

Los montañeros del club en la media

Tras la última subida desde la Calle Cañón a la Muralla del Mar, el recorrido era totalmente llano. A buen ritmo, alcanzamos la Calle Real, la Calle del Carmen y la Plaza de España. Leves signos de cansancio aparecían en Olga pero tan sólo restaban dos kilómetros para la meta.

La campeona Wafiya Benali

Con mucho amor propio Olga sacó fuerzas y camino del Pabellón aumentó ligeramente el ritmo. Entrábamos en el último kilómetro, y vi que íbamos a bajar de 1:40. Al fondo de la pista de tartán, el reloj cronómetro marcaba 1:39, que hizo que todavía Olga sprintara en los últimos metros, llegando a meta en 1:39:28, pulverizando su MMP, en más de 5’.

Olga Rodríguez en meta

El vencedor de la prueba fue el atleta de Alcantarilla (Murcia), David Sánchez Romero, que milita en las filas de la A. D. Eliocroca de Lorca, mientras en mujeres la vencedora fue la compañera del club Marathón Cartagena, Wafiya Benali.

El campeón absoluto, David Sánchez Romero

Toda una satisfacción el hacer de liebre, una vez más, de algún compañero, aunque al fin y al cabo, quien corre es él, y su sacrificio y trabajo diario en los entrenamientos son los que le dan sus frutos. ¡En el atletismo, no hay milagros!

¡Será posible que hiciese de liebre!